«Ante el lema, me han venido rostros, fechas, lugares, vivencias…». Son palabras de Fuencisla Sanz FI, superiora de la comunidad de Montero (Bolivia) e impulsora del grupo Infancia Misionera. Al preguntarle sobre el lema de los 150 años, Fuencisla nos presenta a la familia Rodríguez Coronado, del colegio Virgen de Cotoca (Montero): Jovanna y Delfín y sus hijas Estefanía, Ivana y Graciela.
Toda la familia está comprometida en la misión, haciendo vida la frase de la Madre Cándida “al fin del mundo iría yo en busca de almas”.